Desde el martes 22 de marzo comenzamos el curso «Introducción a la Arquitectura Forense» donde estamos poniendo en debate la relación entre la Arquitectura, los derechos Humanos y los derechos de la Naturaleza. Esto en el marco de la Arquitectura Forense tal como la entiende Eyal Weizman – http://www.forensic-architecture.org/ – . Se trata de recuperar una sensibilidad material en un mundo donde crimen, violencia y construcción funcionan como un proceso de retroalimentación. Se trata de sacar a la Arquitectura de sus marcos normativos y normalizadores, sean estos los de la disciplina, de la normativa legal o de la normalización productivo económica, es decir evitar un punto de vista solo centrado en los procesos civiles y económicos. La arquitectura como paradigma del proceso constructivo, urbanizador, terraformador, es agente de múltiples matrices entrelazadas que exceden lo civil y lo normal.
¿cómo se comporta la organización espacial y material en un campo de relación de fuerzas/poderes heterogéneos? ¿puede la arquitectura ser agente criminal?¿se desprende de esto vectores para su crítica y de-construcción?
Texto de la presentación SCA forensis